Y DEL CRISTO
DE CARNE Y
HUESO
En los días en que estuve escribiendo la ultima entrada
de este blog, sobre la relación de la revista Duda y Rius, también estuve
investigando mucho, leyendo documentos de primera mano, y sobre todo pensando
que durante el tiempo en que compre la revista hace muchos años, el mundo era
muy diferente; para investigar algo aun no se disponia plenamente de internet, y
las bases de datos existentes, eran por lo menos exiguas; no había mas que los
libros, los periódicos, y la investigación casi detectivesca.
En ese tiempo quería saber muchas cosas concernientes a ese mundo que vivía, a las investigaciones efectuadas por los doctos en la materia, a los creadores de la revista, a cualquier dato que estuviera alrededor de ese mundo; pero era difícil.
En los números mas antiguos que tenía de la revista anunciaban los volúmenes de la “Colección Duda”, que desde luego hubieran llenado parte de ese espacio y enriquecido mi curiosidad, pero desafortunadamente, habían dejado de publicarlos hacia tanto tiempo. Tan era así, que nunca conseguí ningún volumen de esa colección.
En ese tiempo quería saber muchas cosas concernientes a ese mundo que vivía, a las investigaciones efectuadas por los doctos en la materia, a los creadores de la revista, a cualquier dato que estuviera alrededor de ese mundo; pero era difícil.
En los números mas antiguos que tenía de la revista anunciaban los volúmenes de la “Colección Duda”, que desde luego hubieran llenado parte de ese espacio y enriquecido mi curiosidad, pero desafortunadamente, habían dejado de publicarlos hacia tanto tiempo. Tan era así, que nunca conseguí ningún volumen de esa colección.
Este domingo pasado, con mucho animo, fuimos a la
ciudad, ya he mencionado muchas veces, los diferentes hábitos -casi rituales-
que se siguen en esas intensas búsquedas Vintage: el camino y el mucho caminar,
revisar objetos y hacer su valuación. Y ese día, en que desafortunadamente
regresamos a casa cansados y con casi nada para la colección, en la mochila un
objeto pedía a gritos ser expuesto,porque valía mucho mas que lo que costo,
porque reivindicaba una vez mas a la suerte o las coincidencias, que había entre
mi colección Vintage y mi querido blog; era ni mas ni menos que el primer
numero de la colección Duda escrito por el tal Rius, un numero que quiza cierra este
ciclo de la investigación de las revistas Duda y que por enésima vez solo
confirma:
Lo increíble, es la Verdad.
Lo increíble, es la Verdad.
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