Una de las cosas que habían quedado pendientes desde hacia bastante tiempo, fue la restauración de la Windsor Vagabundo, Comprada en un super regateo en el tianguis del Sábado de la colonia de los Doctores, pero que sencillamente estaba en pesimo estado.
Tuvo que esperar estas semanas; al final, los resultados y su destino me llenaron de un lacrimogenico orgullo; Cuando la entregue, también, fue uno de los días mas sencillamente increibles de la vida.
Fig. 1. La Vagabundo, completamente restaurada
lista para correr,,,, con cuidado.
Si que quedo de mega lujo, eres un extraordinario restaurador???
ResponderEliminarY ojalá haya más días increíbles como ese :D